GIRO 2023
Derrota al atravesar el Rubicón
JON RIVAS
Todas las crónicas de la contrarreloj del Giro, la que obligaba a los ciclistas a atravesar el Rubicón, que vadeó Julio César con sus tropas para derrocar a Pompeyo y proclamarse Cónsul, se fueron a la papelera unas horas después. Ya no se escriben a máquina, y no hay que hacer una bola de papel con los folios para arrojarlos al cesto. Basta con seleccionar y borrar, pero lo mismo da, porque es un trabajo que ya no sirve, cuando a las seis de la tarde del domingo sí servía. Y todo, por un positivo, que no es un escándalo, como lo solían ser hace unos años, cuando «positivo» era, paradójicamente, la palabra más negativa en el mundo del ciclismo, porque no es dopaje, sino la maldita Covid. Aunque la OMS declaró oficialmente, hace unos días, el fin de la emergencia por la pandemia, la enfermedad sigue dando coletazos, la mayoría leves, pero coletazos, y uno de ellos le golpeó al líder del Giro, Remco Evenepoel, que tuvo que hacer las maletas para viajar a Calpe, en Alicante, la localidad en la que reside.
Y es un mazazo, que después de atravesar el río Rubicón para vencer en la etapa y volver a vestirse de rosa, aun con las dudas que su exigua diferencia con sus perseguidores había levantado, Remco Evenepoel tenga que abandonar la carrera y marcharse a casa. Hizo un test rutinario su equipo, el Soudal Quick Step entre todos los que forman el grupo, y sólo hubo un positivo, el del líder, que se queda con las ganas de seguir peleando por su segundo triunfo en una grande después de vencer en la Vuelta a España del año pasado. «Lamento muchísimo tener que abandonar el Giro. Mi experiencia aquí estos nueve días ha sido magnífica, y estaba motivado para seguir compitiendo», decía Remco en un comunicado difundido por su equipo. «No puedo agradecer lo suficiente al equipo y a los compañeros todo el trabajo y sacrificio que han hecho para preparar el Giro. Estaré animándoles todo lo que queda de carrera». Pero son sus compañeros los que se quedan huérfanos, y el Giro también.
Justo el día anterior, el nuevo líder tras el abandono de Evenepoel, Geraint Thomas, había bromeado sobre la enfermedad que aparta al campeón del Mundo, pero refiriéndose a Primoz Roglic y sus prestaciones en la etapa en la que ambos habían distanciado en catorce segundos a su rival por el podio en Roma: «No está mal para un tipo con Covid», dijo el galés, en referencia a que el esloveno había comentado el rumor que le atribuía un positivo por el virus. «Siempre dice que tiene malas piernas. Ah, la carrera es dura, esto es demasiado difícil, eh, me voy a casa. Y luego va y gana por diez minutos. Quién sabe con él, todo son juegos mentales». No había positivo de Roglic, pero sí de Evenepoel, después de ganar por un segundo la contrarreloj y recuperar el jersey de líder. Pero no saldrá de rosa el martes, después de la jornada de descanso. Lo hará Thomas.